Agua del cielo, no quita riego.

Fumarolas: 6 febrero 2015

Fragmento

Hacía tiempo que no veíamos llover así, Germán; los truenos y relámpagos menudean. A mí me impresionan estas tormentas. Quiero agua, pero agua tranquila, sin alborotos.

Como en Semana Santa, me agrada que se den caramelos en las procesiones, pero no que los tiren como piedras. O en la fiesta del vino, que ofrezcan en mano una botella y no lo arrojarlo como lluvia incontrolada desde las carrozas.

-No exageres, Godofredo. Dice un refrán que “Agua del cielo, no quita riego”. Es un refrán que repiten los agricultores. Riegan aunque llueva, que el agua no sobra y  siempre viene bien.

-También dice la voz de la sabiduría que hay que beber  “dos litros diarios de agua por persona”. Y si no se tiene sed, lo mismo; a beber se ha dicho, que el cuerpo la necesita.

-En Murcia se pedía con carteles: “Agua para todos”. Y supimos   que la idea de los carteles fue de antepasados nuestros, y se guardaron los mismos en un arcón de la Comunidad.  Total, que el agua, por lo visto, siempre ha sido necesaria.

-He pensado seriamente, Claudio, y escribí un Cuento titulado “El Río”, que se guarda en mi libro “Peces Nuevos”, que lo mejor sería no dejar escapar al mar ni una gota de agua. Para ello, construir pantanos y presas por la geografía española con el fin de recogerla. ¿Cómo algo de tanto valor se deja perder con tanta frivolidad?

                            Francisco Tomás Ortuño.  Murcia